El libro, más allá de ser un mero soporte textual, debe ser considerado como una obra de arte en sí misma y como un medio de comunicación a muy diferentes niveles. Es un artefacto físico en cuya materialidad intervienen las más variadas técnicas; pero también es un espacio en el que lo textual y lo icónico interactúan, posibilitando un ámbito de mutua influencia entre literatura y artes plásticas. Nuestro propósito es presentar el libro desde sus más variadas dimensiones, ofreciendo un recorrido lo más completo y novedoso: desde su carácter material hasta el valor simbólico que lo rodea; desde su concepción más práctica hasta la más artística; desde su función como medio para conocer otros espacios y tiempos hasta su capacidad para adaptarse a los retos de la era digital.